Subte: sigue el plan de lucha ante la intransigencia de Metrovías y el Gobierno

28.5.2018

Un plenario de delegados de la AGTSyP resolvió abrir los molinetes este martes, de 17 a 20, en la Línea C. Dellecarbonara no descartó “nuevos paros” si Gobierno y empresa “se mantienen intransigentes”.

“Nos vemos obligados a continuar el plan de lucha por la intransigencia del Gobierno y la empresa”, sintetizó Claudio Dellecarbonara (miembro del Secretariado Ejecutivo de la Asociación Gremial de los Trabajadores de Subte y Premetro), una vez finalizado el plenario de delegados del sindicato en la tarde de este lunes.

El referente de la Línea B y dirigente de la Agrupación Bordó denunció que el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta y la empresa del Grupo Roggio “insisten con desconocer” al sindicato “que representa al 90 % de los trabajadores del Subte, porque prefieren negociar con la UTA, que no representa a casi nadie y acepta que se rebajen los salarios sin cuestionar tampoco los tarifazos ni ningún negociado de la privatizada Metrovías con el Gobierno”.

“Seguiremos defendiendo a los trabajadores y a los usuarios, por lo cual anunciamos que nuestro plan de lucha continúa con apertura de molinetes este martes 29 entre las 17 y las 20 en la Línea C, sin descartar nuevos paros si el Gobierno y la empresa se mantienen intransigentes”, anunció Dellecarbonara.

En el plenario de delegados también se discutió sobre los resultados de los análisis realizados en varios materiales de los trenes que están operando. “Tampoco les interesa nuestra salud ni la de los usuarios: se confirmó la presencia de asbesto, un material cancerígeno, en los vagones de las líneas B, C y E”, denunció el delegado.

 

Conferencia de prensa

 

Luego del plenario, desde el Secretariado Ejecutivo de la AGTSyP realizaron una conferencia de prensa en la sede del sindicato, donde informaron las resoluciones alcanzadas en la reunión previa. Allí estuvieron acompañados por otros dirigentes sindicales, entre ellos Pablo Moyano, Hugo Yasky, Roberto Baradel y Eduardo López.

En la conferencia de prensa el abogado del sindicato Guillermo Gianibelli rebatió las mentiras Rodríguez Larreta y sus funcionarios respecto a la “ilegalidad” de la AGTSyP. Y a su vez se presentaron los resultados de los análisis del asbesto.

Dellecarbonara recordó que “el dueño de Metrovías, Aldo Roggio, está procesado por el caso Odebrecht, el mayor escándalo de corrupción de los últimos años en la región. Pero el Gobierno respecto de esto mira para otro lado, solo le interesa atacar a los trabajadores y a los usuarios que sufren tarifazos y un servicio ineficiente e inseguro”.

 

“El Gobierno miente”

 

Dellecarbonara afirmó que “lo que vimos las últimas semanas es lamentable. El Gobierno miente diciendo que no tenemos derecho a huelga, cuando nos ampara la Constitución Nacional, nos manda a reprimir, falsea la realidad cuando dice que la Corte le prohíbe discutir paritarias con la AGTSyP. El Gobierno se ha transformado en una máquina de mentirle a la población con tal de atacarnos para pasar su plan de ajuste”.

El plenario de delegados resolvió, a propuesta de la Agrupación Bordó, convocar a una reunión de solidaridad para el próximo viernes a las 17, donde participarían diversas organizaciones sindicales, políticas y sociales.

La agrupación referenciada en Dellecarbonara, a su vez, propuso en el plenario que el sindicato realice una compulsa entre las trabajadoras y los trabajadores del subte para demostrar lo que el Ministerio de Trabajo no quiere que se sepa: que es ese sindicato el que tiene una afiliación y una presencia abrumadoramente mayoritaria en el subte. La propuesta no fue votada por el plenario, al igual que otra propuesta de la Bordó: paro de dos líneas del subte esta semana además de apertura de los molinetes.

El Teatro Colón festejó sus 110 años con Aida

28.5.2018

Aida fue la ópera de Giuseppe Verdi con la que se inauguró el Teatro Colón en 1908.

El domingo 27 se festejaron los 110 años del gran teatro con una función que también pudo verse en streaming por quien quisiera desde la página del Colón, también fue proyectada en la llamada Plaza Vaticano, al lado del teatro a la intemperie, y en varios teatros del país, hasta en el Teatro Municipal de San Pablo (Brasil), y el Teatro del Lago de Frutillar (Chile).

La puesta en escena del recordado Roberto Oswald, estuvo a cargo de Aníbal Lápiz, y con un gran despliegue visual y musical. Junto a la Orquesta, el Ballet y el Coro Estables del Teatro Colón se destaca un importante reparto bajo la batuta del maestro Vieu, quien cuenta su experiencia en este video.

La ópera Aida compuesta de cuatro actos y con libreto de Antonio Ghislanzoni, se estrenó el 24 de diciembre de 1871 en la Ópera de El Cairo. Fue un encargo de Ismail Pachá, jedive de Egipto para su estreno en enero de ese año pero la guerra franco-prusiana provocó el retraso en el envío desde París de importantes piezas del vestuario diseñado por Auguste Mariette, un egiptólogo muy importante de la época.

El jerarca egipcio ya le había hecho propuestas a Verdi para que escribiese una ópera por la inauguración del Canal de Suez, una obra faraónica para la época. Pero no aceptó, aunque finalmente la escribió para la Ópera de El Cairo. Verdi no asistió a su estreno pero sí fue al europeo en la Scala de Milán al año siguiente. Los gobernantes egipcios querían mostrar su gran nación al mundo, y de ahí la majestuosidad de sus puestas en escena. Egipto, con su canal que unía el Mar Rojo con el Mediterráneo, había logrado el acortamiento de las rutas comerciales entre Europa y el Sur de Asia. Por su importancia estratégica, en la Primera Guerra Mundial, el imperialismo británico ocupó el Canal de Suez.

Segovia: “Hasta que no nos sentemos a arreglar paritarias va a haber medidas”

27.5.2018

Los metrodelegados reclaman ser parte de la negociación de las paritarias del subte, que ya cerró la UTA con el Ministerio de Trabajo porteño y con Metrovías.

El líder sindical de la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y el Premetro, Néstor Segovia, anticipó medidas de fuerza para esta semana, en el marco del plan de lucha que los trabajadores llevan adelante en reclamo por la negociación paritaria.

Hasta que no nos sentemos a arreglar paritarias va a haber medidas“, al tiempo que señaló que “seguramente” levanten molinetes.

Los metrodelegados definirán este lunes, en un plenario a puertas cerradas, qué medidas tomarán para continuar con sus protestas en el subte, después de una semana que quedó marcada por un paro de todas las líneas realizado el martes tras la detención de 16 trabajadores, entre ellos Segovia.

“El lunes se realizará un plenario de delegados, a puertas cerradas, en el que se evaluará el desarrollo del conflicto y las nuevas medidas que llevaremos adelante en el marco del plan por continuar discutiendo las paritarias y exigiendo el retiro de las sanciones a los compañeros que levantaron molinetes”, afirmó Enrique Rositto, secretario de prensa de los metrodelegados.

De acuerdo con lo previsto, el plenario tendrá lugar en la sede de la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y el Premetro (Agtsyp), ubicada en la calle Carlos Calvo 2363, en el barrio porteño de San Cristóbal.

Las acciones de los metrodelegados en rechazo del acuerdo salarial firmado por la Unión Trnviarios Automotor (UTA) y Metrovías, y en reclamo de “paritarias libres y sin techo” comenzaron a mediados de abril pasado.

Los metrodelegados reclaman ser parte de la negociación de las paritarias del subte, que ya cerró la UTA con el Ministerio de Trabajo porteño y con Metrovías.

El incremento salarial que se rubricó el gremio que lidera Roberto Fernández es del 15,2 %, alza que rechazan los metrodelegados, que tienen su personería gremial suspendida por un fallo de la Corte Suprema que ratificó una decisión de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo.

La última medida de fuerza que activaron los metrodelegados fue el jueves, cuando liberaron molinetes en la línea H y entregaron folletos explicativos del conflicto del subte a los usuarios

El SiPreBA exige la liberación del fotógrafo de la Garganta Poderosa y de un vecino de la Villa 21, detenidos ilegalmente por la Prefectura Naval

27.5.2018

El SiPreBA exige la liberación del fotógrafo de la Garganta Poderosa y de un vecino de la Villa 21, detenidos ilegalmente por la Prefectura Naval

En la puerta de la Comisaría 30, activistas y vecinos reclaman la libertad del reportero gráfico y de su vecino, presos por decisión del juzgado 29, a cargo de Karina Rodríguez, a quienes -según alertan los compañeros de la publicación- pretenden “mantener encerrados hasta que presten declaración, sin pruebas testimoniales ni riesgo procesal y sólo a partir de los dichos de efectivos de la fuerza de seguridad”, quienes a su vez están acusados por apremios ilegales y represión contra los habitantes de la villa.

Los vecinos denuncian que la decisión de la jueza tiene como objetivo desviar la atención y provocarlos ya que, manifiestan “el problema que tenemos no está en la Comisaría sino en el barrio, debido a la impunidad con que los prefectos se manejan en la villa 21-24.

Asimismo, anticiparon que presentarán tantos elementos probatorios sobre el mal accionar de la Prefectura que la Justicia no podrán discutir otra cosa que las violaciones a las garantías constitucionales de los habitantes del asentamiento.

Un testimonio recolectado por el reportero gráfico Sebastián Miquel señala que “adujeron una supuesta persecución a dos menores a quienes, según testigos, los prefectos verdugueaban’ y subieron a palos a un interno de la línea 70 de colectivos, al que hicieron parar para bajarlos justo enfrente de la vivienda de Iván Navarro, en Iriarte al 3.500, frente a la casa de la Cultura, donde vive la familia que tiene que declarar esta semana en el primer juicio oral que se eleva contra la Prefectura Naval por las torturas a sus compañeros Iván y Ezequiel el 24 de septiembre 2016.”

“Frente a su casa bajaron con los dos menores y provocaron una trifulca golpeándolos para que los vecinos reaccionaran, cosa que no pasó, ya que interpelaron a los funcionarios para que dejaran de hostigar a los adolescentes”, prosigue el relato y añade que “la respuesta fue una represión injustificada con gases lacrimógenos y balas de goma que terminó baleando el frente de la casa de Iván, cuyo padre debe declarar el próximo viernes”. Cabe mencionar que el hecho sucede luego de que el viernes último, tras la declaración de Ezequiel, lo persiguieran diciéndole -“Ahí va el buchón, van a ver lo que te va a pasar”.

Lo que sucedió quedó más que claro ya que no solo balearon la casa de Iván sino que en la represión cerraron la reja del pasillo lindero, donde vive Roque, fotógrafo de La Garganta, y cuando la gente buscó ponerse a resguardo rompieron la puerta de su casa a patadas y entraron para seguir golpeando a los mismos jóvenes que estaban hostigando.

El testimonio revela que Pablo, compañero de la Garganta y cuñado de Roque, que vive en la misma casa junto con otra familia, cuando vio que provocaban pibes dentro de su propia casa intentó intervenir para que no los lastimen y los efectivos le pegaron. Y cuando quiso intervenir su compañera, Jéssica, militante de La Poderosa de la villa 21 y hermana de Roque, los prefectos la empezaron a manosear. Cuando Roque vio la escena atinó a buscar su cámara de fotos para registrar el hecho y también fue brutalmente agredido. De acuerdo con la declaración, los mantuvieron secuestrados durante horas en una casilla, lapso durante el cual los golpearon en forma salvaje y todavía siguen detenidos. Mientras esto sucedía, a la hermana de Roque la hicieron pasear por la villa durante 80 minutos. Dijeron que la llevaban a la Comisaría 30, pero nunca llegó.

Los vecinos evalúan que se trata de una provocación porque la Prefectura quiere desviar la atención sobre lo que es realmente grave, que es la problemática que debe soportar el barrio día tras día.

Anticiparon que el viernes una caravana conformada por vecinos, vecinas, movimientos populares, curas y maestras y maestros villeros marcharán a las 8 de la mañana desde la puerta de la casa de Iván a acompañar a la familia que va a ir a declarar porque en la causa de Iván y Ezequiel se juega la visibilidad de todos estos casos que estérilmente denuncian todos los días.

Y aclararon que si hoy no hay tumultos en la puerta de la Comisaría es porque ya aprendieron que lo que quieren las fuerzas de seguridad es correr el eje de lo que realmente sucede.

El testimonio recogido por la Garganta Poderosa señaló: “A quienes torturaron a Iván y a Ezequiel, diciéndoles que griten porque nadie los iba a escuchar, los sentamos en el banquillo de los acusados y están ahora procesados con prisión preventiva. A los que el sábado llevaron adelante este operativo ilegal también los vamos a sentar en el banquillo. Pero en algún momento nos tenemos que poner a pensar cuándo van a estar en el banquillo de los acusados los responsables políticos de que estas prácticas sucedan de manera sistemática adentro de nuestros barrios”, remarcó.

Los datos son contundentes: el control popular denunció más de 1.000 casos de torturas y apremios ilegales por parte de las fuerzas de seguridad en un mes. Y tan solo en la villa 21-24, entre abril y mayo, seis casos de torturas, anteriores a esta, que repiten prácticas sistemáticas desde golpizas aberrantes y prácticas humillantes como obligarlos cantar una canción con un revólver en la cabeza, o someterlos durante horas arrodillados bajo la lluvia, hasta el “levanta-muertos”, que es la nueva técnica: gas pimienta en los ojos de los chicos adolescentes maniatados para que se retuerzan en el piso.

Los activistas aseveran que “esa es la realidad que se está viviendo en los barrios y eso es lo que tenemos que discutir y no la Comisaría, que ya tiene que liberar a nuestros compañeros. Es responsabilidad del juzgado 29, de Karina Rodríguez, que nuestros compañeros recuperen la libertad de manera inmediata”.

Y fundamentan: “no existen pruebas testimoniales, porque no hay riesgo procesal, porque no secuestraron ningún elemento del supuesto delito, porque los médicos legistas no registraron lesiones en sus prefectos y sí las registraron en nuestros compañeros, y porque la única arma que está secuestrada es la oficial de la Prefectura Naval Argentina con la que dispararon en la fachada de la casa donde vive Iván Navarro y su familia, que esta semana tiene que declarar por la denuncia de tortura de esta misma fuerza de seguridad en el mismo barrio”.

Desde el Sindicato de Prensa de Buenos Aires exigimos el cese de las persecuciones policiales a vecinos, activistas y trabajadoras y trabajadores de Prensa de las villas y ratificamos el compromiso con nuestras compañeras y compañeros de los medios autogestivos, alternativos y populares.

Represión y detenciones arbitrarias en la villa 21-24

27.5.2018

Tres vecinos de la villa 21-24 fueron detenidos en la noche del sábado durante un violento e ilegal operativo de la Prefectura Naval Argentina (PNA), que se metió en una casa disparando balas de goma, gases y golpeando, para luego llevarse arbitrariamente a Roque Manuel Azcurraire (30), fotógrafo de la revista villera La Garganta Poderosa, Juan Pablo Mónaco (35) y María Silvia Echevarría (32), esta última ya en libertad.

Todo ocurrió a metros de la casa de Iván Navarro, quien se encuentra en pleno juicio por las torturas que sufrió en septiembre de 2016 por parte de las mismas Fuerzas de Seguridad, junto a su compañero Ezequiel Villanueva Moya. Por Jésica Azcurraire* Prensa La Garganta Poderosa

 

El allanamiento sin orden judicial a la casa de los tres detenidos se dio luego de que dos chicos de 16 y 22 años habían sido requisados y verdugueados por efectivos de esa Fuerza. Después de una discusión, el menor fue golpeado con la cachiporra en la cabeza, lo que luego motivó el reclamo de los familiares y una violencia aún mayor de la PNA, reforzando su presencia con más de 100 uniformados. En medio del operativo irregular que se llevó a cabo, quisieron ingresar a la casa en la que se había resguardado toda la familia, además de algunos vecinos. Los oficiales de Prefectura entraron a la fuerza, golpeando a hombres y mujeres, y disparando balas de goma. También, las Fuerzas de Seguridad tiraron contra la casa de Iván Navarro, en donde otros vecinos del barrio intentaron encontrar refugio.

Allí, en su propia casa, se llevaron detenido a Roque por grabar en video con el celular durante el abuso de la autoridad. Junto con él, su hermana y su cuñado también fueron trasladados a la garita de Prefectura Naval ubicada entre las calles Luna y Pedro de Luján, donde estuvieron rodeados de un fuerte operativo con al menos 45 efectivos armados con escudos antidisturbios, gas pimienta y armamento. En ese lugar los mantuvieron arrodillados varias horas en el suelo, mientras los efectivos presentes no querían dar el nombre del responsable del operativo realizado en la villa 21-24. Además, pocos oficiales estaban identificados.

Tanto Roque como Juan Pablo permanecen detenidos en la Comisaría 30 de la Policía de la Ciudad, en California entre Herrera y Hornos, en Barracas. La causa avanza en el Juzgado N°29, a cargo de Carina Nancy Rodríguez.

 

“Rompieron mi puerta, me manosearon, apalearon a mi sobrino y secuestraron a mi hermano, por intentar filmar cómo baleaban la casa del vecino que denunció torturas”

 

Todavía no entiendo nada. Sigo adentro de una película de terror que comenzó anoche, cerca de las 11, cuando varios prefectos realizaron una requisa y empezaron a verduguear a mi sobrino de 16 años, que terminó cagado a palos como tantos pibes. Se había ido a jugar al fútbol y llegó a casa con toda la cara hinchada, corriendo, desesperado. Al escucharlo, salimos para pedirles explicaciones a los prefectos, pero mi hermana cometió la “imprudencia” de preguntarles a los uniformados por qué le habían pegado así a su hijo, ¡un menor! Ahí nomás, la respuesta fue clarísima: “Cerrá el orto”. Y la segunda, cuando ya eran más de 40 uniformados, no necesitó palabras: se abalanzaron sobre nosotros literal y brutalmente, desatando una cacería que les permitió cagar a tiros el frente de la casa de Iván Navarro, cuya familia debería prestar testimonios esta misma semana, en el primer juicio oral que logramos elevar por torturas de la misma Prefectura, en este mismo barrio.

Largada su razzia, una vez más, veo cómo la Prefectura empieza a lanzar gases en el pasillo donde vivimos y corro lo más rápido posible para entrar a casa, creyendo que nos pondríamos a salvo. Pero no existe ley para ellos, cuando de la villa se trata: automáticamente comenzamos a escuchar cómo pateaban el portón, cada vez más fuerte, hasta dejarlo como un papel rasgado. Entraron, sí, como si nada. Todos hombres, cinco, me agarraron de los pelos, me apretaron el cuello, me patearon las piernas y me dieron con sus palos, hasta que uno me puso contra la pared, manoseándome las tetas. Aterrada, grité: “¡Soltame, me estás tocando!”. Y peor, me estrujó como una bestia: “Callate, puta de mierda. ¡Callate, la re concha de tu madre! Negra de mierda, sucia, bocona”.

Al costado, la represión contra todos los vecinos continuaba recrudeciéndose y mi compañero no podía ayudarme, porque lo estaban sacando a las patadas, ¡justo a él! No hay nadie que no lo conozca en el barrio, como vecino, como laburante y como activista de nuestra asamblea. ¡Estaba durmiendo la siesta! Y horas antes había estado ayudando con las obras en nuestra “Casa de la Mujer”. ¡Pero qué importa! Con la mayor impunidad jamás vista, gritaban: “Chúpenlo, no importa, ¡agarren a cualquiera!”.

Dicen que “secuestraron un palo”, sí, ¿saben qué palo secuestraron? El palo que cierra la puerta de nuestra casa, porque lamentablemente no tenemos ni una cerradura, entonces usamos ese “palo” para evitar el ingreso de todas las personas civilizadas que necesitan aplaudir o tener una orden de allanamiento para entrar, cuando no pueden valerse de las armas y la impunidad del Estado.

Siempre con su cámara cerca, mi hermano Roque intentó registrar toda esa locura, pero no llegó a filmar nada porque se lo llevaron también, en cuanto se presentó como fotógrafo de La Garganta, ¿entienden? Su único delito fue haber descongelado tres empanadas y haber tomado su herramienta de trabajo cuando un operativo ilegal de la Prefectura se metió a nuestra casa, rompiendo la puerta a las patadas. Pero no conformes con llevarse a mi hermano y mi compañero, nos volvieron a reprimir y se llevaron a mi hermana, para pasearla durante 80 minutos en patrullero, mientras nos negaban su presencia en la comisaría que señalaba el Juzgado.

¡Basta, por favor!

Pensamos que nos mataban. Y sí, otra herida nos hace temblar, quedamos aterrados. ¡Pero nunca más en la vida, nos vamos a quedar callados!

 

* Jésica Azcurraire es vecina y asambleísta de la Villa 21, reprimida y abusada esta madrugada por la Prefectura.

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