9.3.2020
Por Larisa Pérez
Luis, el amigo que acompaño al Argerich al hombre que falleció el pasado sábado, contó la cadena de fallas el sistema de salud para contener el virus. Los trabajadores del Argerich exigieron licencia para los que habían estado expuestos, más personal y recursos. Mientras, Larreta aseguró en conferencia de prensa que el sistema funciona correctamente.
El sábado pasado se confirmó la primera muerte como resultado del coronavirus en Argentina y en Latinoamérica. El paciente era un hombre de 64 años, que el 28 de febrero comenzó con fiebre, tos y dolor de garganta. Además, padecía varias enfermedades prexistentes -diabetes, hipertensión, bronquitis crónica e insuficiencia renal-, por las que fue internado.
Sin embargo, la confirmación positiva de coronavirus llegó luego de haber fallecido, habiendo estado internado en el hospital Argerich desde el jueves. Es decir, no se activó el protocolo correspondiente mientras tanto.
Ahora sus familiares dijeron que no funcionó el sistema de ambulancias ni tampoco la guardia a la que tuvo que llegar por sus propios medios. Esto demuestra que las declaraciones del Gobierno de la Ciudad siguen tapando la insuficiencia de recursos destinados al sistema de salud público. Una realidad que conocen todos los que se atienden y trabajan en este sistema.
Luego de conocida la noticia de la muerte, el subsecretario de Planificación Sanitaria de la Ciudad, Daniel Ferrante, y el director General de Hospitales, Sergio Auger, brindaron una conferencia de prensa frente al Hospital Argerich. Aseguraron que el protocolo para casos de coronavirus se aplicó en el paciente y definieron que la gravedad de su caso se vinculó con “las enfermedades preexistentes que presentaba”. El objetivo fue reforzar que desde el Gobierno se está actuando de forma correcta.
Este lunes por la mañana, Horacio Rodríguez Larreta Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, junto con el ministro de Salud porteño Fernán Quirós, dieron otra conferencia de prensa. Larreta confirmó que hay 9 casos confirmados en CABA, que se está siguiendo exactamente el protocolo y reforzando los operadores de la línea 107 del SAME. Pidió que ante los primeros síntomas de casos de personas que vinieron de viaje, colaboren permaneciendo en sus casas, con quince días en cuarentena. “Si en este período hacen fiebre inmediatamente llamar al 107, el protocolo está funcionando. Desde el jueves para acá hemos redoblado la capacidad de los operadores, llamen al 107”, afirmó Larreta.
Y agregó: “De hecho los últimos casos no fueron a la guardia, llamaron al 107, va el SAME directamente a la casa, y se los atiende en los hospitales que corresponda con el proceso de aislamiento para no entrar en contacto con otra gente en los sanatorios”. Reiteró que efectivamente el sistema está funcionando bien y con rápida respuesta de la línea del SAME 107.
Sin embargo, en una entrevista este mismo lunes se pone en evidencia que la crisis estructural de un sistema de salud público desfinanciado puso en riesgo al paciente que falleció, y a los que estuvieron en contacto con él. El amigo que llevó a la guardia a la persona fallecida contó que ya había hecho dos visitas a la guardia por el cuadro de fiebre, antes de tener que volver y llevarlo en persona al Argerich por haberse complicado su cuadro. Además que el sistema de ambulancias por la línea 107 del SAME nunca llegó.
Una vez en la guardia tuvieron que esperar horas sin atención, hasta que llamaron la atención de una doctora en el pasillo que les dio barbijo e hizo que los atendieran. A partir de ese momento quedó internado en un sector con acceso restringido, pero donde tanto el personal de la salud que lo atendía como sus visitas accedían sin tener los recaudos necesarios que establece el protocolo por coronavirus ya que no estaba confirmado.